Colombia desgravará los bienes industriales originarios de Israel de manera inmediata o gradual, según el grado de sensibilidad, de forma que el aparato productivo colombiano pueda adecuarse a las nuevas condiciones de competencia.
En tal sentido, el 69,5 % de las líneas arancelarias del ámbito industrial ingresarán libre de gravámenes desde la entrada en vigencia del acuerdo, un 0,3 % a tres años, un 14,7 % adicional en cinco años, el 12,9 % en siete años y el 2,6 % en 10 años.
Desde Israel, ingresará libre de gravámenes desde el inicio del acuerdo, productos como maquinaria, aparatos de óptica, medida y control, algunas armas y sus municiones, productos químicos industriales, abonos, resinas petroquímicas, y autopartes. La mayoría de estos bienes no son fabricados en Colombia y constituyen insumos requeridos por la industria para mejorar su competitividad.
A los tres años ingresarán algunos productos farmacéuticos, manufacturas de cuero, suéteres, placas y baldosas y transformadores eléctricos. Luego de cinco años de vigencia ingresará cosméticos y las preparaciones de belleza, productos químicos industriales, autoclaves, aparatos de comunicación, algunas armas y sus municiones.
A los siete años se incluyó, básicamente, resinas petroquímicas, pinturas y colorantes, pañuelos y toallitas de desmaquillar, fibras e hilados, conductores eléctricos, entre otros. En 10 años se concentra productos para envasar de plástico, algunos tejidos y muebles de plástico.
De la mano de Procolombia se han identificado buenas posibilidades de insumos para productos farmacéuticos y dientes acrílicos, así como materiales de construcción pueden jugar importante rol, juguetería, vidrios de seguridad para vehículos, muebles y maderas modulares.